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Invierno

Camiño de Balarés

¡Que el invierno no sea impedimento para explorar estos caminos! Escoge las jornadas más clementes para disfrutar de los cambios que el frío deja en el paisaje intermareal y marítimo.

El azul grisáceo del mar y el intenso olor a sal que desprenden las olas te acompañará en los casi doce kilómetros de la ruta Camiño da ribeira (PR-Gr 148) entre Ponteceso y Corme. Algo más si tienes aliento para sentir el esplendor del paisaje de la Costa da Morte en el tramo alternativo entre Corme y cabo Roncudo o si quieres hacer la vuelta hasta la capital municipal por la variante que sube desde la Pedra da Serpe hasta el Alto dos Loureiros y acaba en el monte Branco (PRG-148.1).

En la ruta Pondaliana encontrarás la vegetación dormida, pero las ramas desnudas y los verdes más apagados serán también un aliciente para ir recurriendo los catorce monolitos distribuidos entre la capital municipal y el mirador del monte Branco leyendo cada uno de los poemas escritos por Eduardo Pondal.


El invierno también es tiempo para ver el espectáculo de los temporales justo al lado del mar. Eso sí, mejor resguárdate en el calor de alguno de los locales adheridos a la Red de Dinamizadores Turísticos  u oyendo caer la lluvia contemplando las obras de la Fundación Torre-Pujales, Museo de Arte Contemporáneo de la Costa da Morte en Corme. No olvides extremar las precauciones en lugares escurridizos y ten cuidado con las subidas de las mareas en determinadas partes del camino.

  • GAC 3 Costa da Morte
  • Fondo Europeo de Pesca
  • Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente
  • Consellería do Medio Rural e do Mar
  • Web municipal Ponteceso
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